miércoles, 11 de marzo de 2015

ADOLESCENTES: CONTEXTO SOCIAL O ¨ AMBIENTE ¨

Para comprender que está ocurriendo con los adolescentes españoles habría que enmarcarlos dentro del contexto social donde están creciendo.

El modo en el que se están comportando es fruto de esta sociedad consumista, individualista, y tecnológica. Muchos de ellos crecen muy solos porque los padres tienen toda la jornada ocupada por el trabajo, se están educando sin apenas límites ni pautas porque estamos en un proceso de cambio social sin precedentes y además son bombardeados por una publicidad brutal.

FAMILIA  

La convivencia con chicos y chicas en plena efervescencia hormonal acarrea a menudo problemas en la familia.

La familia es importante para ellos, en ella encuentran su refugio casi perfecto con muchas concesiones, poca competencia (con un solo hermano o hijo único) y poca exigencia.

Con respecto a esa exigencia ha habido un par de generaciones que como reacción a su infancia en un contexto represivo, han preferido ser padres en exceso permisivos, se ha pasado del autoritarismo a dejarles hacer lo que les dé la gana por temor a frustrarlos, hasta llegar al actual vacío de normas. Así a partir de los 12 años puede resultar complicado vivir  con los propios hijos, porque se vuelven quejicas, apenas colaboran, se encierran horas en su cuarto, pelean sin tregua para alargar la hora de llegada a casa y mienten para conseguir lo q quieren.

AMIGOS  

Su grupo de referencia es un punto vital, lo que más les importa es lo que tiene que ver con su grupo.

Para muchos adultos es preocupante la poca conciencia social de los jóvenes, para los que lo más importante es saber que van hacer el siguiente fin de semana y el resto del mundo apenas les inquieta. 

A esta edad los padres ya no pueden competir con los amigos, y les preocupa que la pandilla con la que salen sus hijos sea la adecuada porque la influencia sobre ellos va a ser fortísima.

Los adolescentes salen y se reúnen con sus amigos como principal actividad del tiempo libre, con ellos aprenden a desenvolverse socialmente y surgen los primeros enamoramientos. Las relaciones entre chicos y chicas son bastante igualitarias y las relaciones sexuales muy liberales (edad de comienzo de éstas a los 16 años), pero aunque disponen de mucha información sexual, no son muy responsables, la tasa de embarazo adolescente en España es bastante alta y por otro lado Organismos contra el SIDA informan que los jóvenes heterosexuales creen que ese no un problema suyo.

LIMITES

Hay un enorme grupo de chicos sin brújula y ahí surgen los casos de los más descontrolados. Hay un importante nivel de violencia entre los menores,  propiciado porque no se les han puesto límites, no han recibido una educación en responsabilidad y no soportan la contradicción. La novedad con respecto a la violencia es que ésta se ha introducido en el ámbito escolar, traspasando la frontera de la calle, el fracaso escolar en secundaria ronda el 30 por ciento, y los adolescentes más desmotivados q nunca, alardean de los suspensos como medallas.

El consumo de drogas es el tema que más preocupa a los padres. Los jóvenes españoles son los que tienen el acceso más fácil a todo tipo de drogas. El consumo de alcohol y de hachís se ha disparado,  como datos significativos el consumo de alcohol ha aumentado en los últimos dos años, y la mujer está igualando su consumo al del hombre, además en la mayoría de los casos el primer contacto con alcohol se ha desarrollado dentro del núcleo familiar. Hay un debate sobre la eficacia de medidas represivas como reprimir el botellón, pero lo cierto es que muchos opinan que esto no servirá de nada porque esta práctica no tiene tanto que ver con el consumo de alcohol como con la necesidad que sienten los jóvenes de estar juntos y de comunicarse entre ellos.

Los adolescentes de hoy están dispuestos a experimentarlo todo, y cómo les cuesta distinguir la frontera entre lo real y lo irreal, todos los estimulantes son bien recibidos.

TECNOLOGÍA  

La mayoría dispone de teléfono móvil, consola, ordenador personal, TV, y equipo de música en su propio cuarto. 

Hablan mucho por teléfono, y ni que decir tiene de la habilidad con la que utilizan el pulgar para mandar mensajes desde su móvil. En esta franja de edad comienzan a usar Internet con regularidad.

También la tele y los videojuegos se encuentran entre sus actividades de ocio favoritas, ven todo tipo de programas pero sobre todo les gustan las series y los de música. También se atiborran de publicidad, y les bombardean con mensajes donde todo se consigue sin esfuerzo, aunque no sean conscientes de ello la carga publicitaria acaba dejándoles huella. Porque el problema no es que cada vez más recurran a la tecnología sino que hacen uso de ella sin medida ni criterio. Esto propicia el individualismo, la incultura, la dependencia y la adicción.

IMAGEN Y CONSUMISMO  

El aspecto personal adquiere una importancia desmesurada. Se comparan con el tipo perfecto de la publicidad y aunque no  reconozcan que les afecta son muy vulnerables. No es extraño que se sientan frustrados que no les guste su cuerpo y que se depriman. 

Esta es una etapa en la que intentan adoptar un estilo propio y hasta un lenguaje diferente, donde los tacos adquieren protagonismo. A veces el tipo de ropa que eligen, el empeño en lucir el piercing, tatuajes, y abusar de los tintes de pelo son motivo de conflicto familiar. 

La fiebre por el consumismo es algo que preocupa también a sus progenitores, los adolescentes de hoy tienen de todo, disfrutan de ventajas desconocidas para generaciones anteriores, pero quieren más. También manejan bastante dinero: la paga de los padres, de los familiares, etc... eso unido a la capacidad de persuasión que tienen para conseguir lo que quieren, a base de dar la lata consiguen caprichos extras.

El ansia por tener cosas ha generado un fenómeno preocupante: los robos por encargo, quienes lo realizan no son delincuentes al uso, sino chicos de familias perfectamente estructuradas que se especializan en robar en grandes almacenes.

FUTURO 

Se  tiene la sensación de que la adolescencia es algo pasajero, un vuelo entre la infancia y la madurez, repleto de turbulencias pero los padres siempre tienen la esperanza de que los hijos aterricen en una pista segura, sin embargo dada la naturaleza de la actual generación algunos ven el futuro de éstos con cierta preocupación. 

Lo cierto es que a la vuelta de la esquina les aguarda una realidad dura, con trabajos precarios, viviendas por las nubes, hay que tener en cuenta que los jóvenes españoles somos los que más tardamos en independizarnos. 

El futuro les parece algo remoto, probablemente porque la adolescencia cada vez se está alargando más. 

Los adolescentes son cómo nosotros los adultos, que trabajamos lo menos posible para consumir lo más posible. Lo que debemos hacer es enfrentarnos al espejo de nuestro estilo de vida, en él nos vamos a encontrar con nuestros adolescentes y a lo mejor tenemos que pararnos a pensar q estamos priorizando en nuestra sociedad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario